El Diseño marca la Diferencia en tus Presentaciones

El diseño es uno de los aspectos más importantes de una presentación. Un buen diseño puede marcar la diferencia entre una presentación exitosa y una que fracasa. A menudo, la gente piensa que el diseño no tiene potencial o que no es necesario para una presentación. Sin embargo, esto no podría estar más lejos de la realidad.

Hay más de 500 millones de usuarios de PowerPoint y se hacen casi 30 millones de presentaciones al día en todo el mundo, así que impactar a tu audiencia y no hacer una presentación aburrida y poco atractiva se hace cada vez más complicado.

Además, con las herramientas online que proporcionan plantillas y presentaciones completas ya diseñadas a las que cualquiera puede acceder, la originalidad y creatividad es un plus en el diseño de tu presentación.

El diseño no se trata solo de hacer que las cosas se vean bien, el diseño te va a ayudar a establecer el tono de la presentación, transmitir información importante e involucrar a la audiencia.

De lo que se trata es de crear un mensaje efectivo que resuene en tu audiencia. 

La combinación correcta de imágenes, texto y colores te va a ayudar a transmitir el mensaje de una manera que las palabras por sí solas no pueden. Además, sabemos que el cerebro humano es capaz de retener más información visual que cualquier otra: recordamos un 80% de lo que vemos, un 20% de lo que leemos y sólo un 10% de lo que escuchamos. Por tanto, si la presentación cumple con la base de los códigos de diseño y además tiene una propuesta impactante y con carácter, será todo un éxito.

EL RETO DE FUSIONAR UN DISEÑO CONCEPTUAL CON UN GUION ESTRUCTURADO

Para crear una presentación que sea conceptualmente fuerte y fácil de seguir, tienes que saber que el diseño es tan importante como el contenido.

Una presentación bien diseñada puede hacer que las ideas sean más atractivas y fáciles de entender. Aquí te dejamos algunos consejos a tener en cuenta a la hora de diseñar tu propia presentación.

1. La primera impresión importa y es la que habla de ti.

El aspecto general de su presentación debe ser profesional y pulida. Esto transmite a su público que se toma en serio su tema y que es competente en lo que hace.

Dedica tiempo a su diseño y cuida de que el logotipo, la identidad corporativa de la empresa, los colores principales (utiliza tu paleta de colores), la tipografía y las formas que la componen tengan coherencia visual.

Todos los puntos de contacto deben tener una unidad de marca.

2. La presentación no es un documento de texto.

Es importante recordar que tu audiencia no está allí para leer un documento. Están para participar y entretenerse. Eso significa que necesitas diseñar tu presentación con eso en mente, nunca hay que olvidarse de a quién nos dirigimos.

3. Crea un guión y simplifícalo con el diseño.

Puedes empezar  haciéndote estas preguntas: ¿Cuáles son los puntos principales que quiero transmitir? ¿En qué orden los voy a presentar? y una vez tengas una idea general del flujo de la presentación, puedes comenzar a agregar detalles más específicos. Por ejemplo:

• • Piensa en qué elementos visuales te ayudarán a respaldar cada punto. ¿Vas a necesitar tablas o gráficos? ¿fotos o vídeos?. No intentes meter demasiada información en una presentación y utiliza las imágenes con prudencia, úsalas solo cuando realmente mejoren el mensaje.

• • Crea iconos o incorpora fotografías para los conceptos, mapas para describir ciudades y gráficos que sustituyan datos complicados. Las diapositivas deben ser un apoyo y el diseño un enganche.

• • La animación también tiene valor. A muchas personas no les gusta usar animaciones, argumentando que el público se marea. Pero si utilizamos las animaciones y transiciones sin abusar y de manera coherente nos ayudará a agilizar la presentación esto nos ayudará a marcar ritmos de lectura y a contar historias.

Recuerda: Son las historias las que mueven a la gente.

En conclusión, una presentación con un buen diseño es ganar para ganar.

Se genera más confianza y credibilidad con los clientes o audiencia porque conseguir que la información compleja sea más fácil de entender motiva a las personas a querer saber más. Además, apreciarán el tiempo y el esfuerzo que dedicas a hacer que tu presentación sea visualmente atractiva e impactante.

No subestimes el poder del diseño en tus presentaciones